26 de julio de 2011

El gran despertar




¿Cómo se que el amor a la vida no es una ilusión? ¿Como se que quien teme a la muerte no se asemeja al hombre que se alejo de su hogar cuando joven y, por lo tanto, no tiene intención de regresar? Quienes por la noche sueñan con un festín, a la mañana siguiente deben llorar y lamentarse. Quienes sueñan que lloran y se lamentan, a la mañana siguiente deben salir a  cazar. Cuando sueñan, no saben que están soñando. En su sueño, incluso deben interpretar el sueño. Solo cuando están despiertos empiezan a saber que soñaban. Luego viene el gran despertar, y entonces  descubrimos que la vida misma es un gran sueño. Los tontos piensan todo el tiempo que están despiertos, que saben. Con sutiles discriminaciones establecen distinciones. ¡Que estupidos! Ellos y tú estáis en un sueño. Cuando digo que estáis en un sueño, yo también estoy en un sueño.

Chuang Tzu, Fung Yu-lan


24 de julio de 2011

Fractales




"Alcanzar el centro del laberinto supuso encontrar el tesoro prometido…Sin embargo pronto descubrió que aquel laberinto solo era un pequeño fractal  de otros muchos laberintos y pruebas que debería resolver durante su vida."
                                      

 

18 de julio de 2011

El arte de vivir




Disciplina y concentración

Nuestra cultura lleva a una forma  de vida difusa y desconcentrada, que casi no registra paralelo, se hacen muchas cosas a la vez: se lee, se escucha la radio, se habla, se come, se bebe. Somos consumidores con la boca siempre abierta, ansiosos y dispuestos a hurgarlo todo: películas, bebidas, conocimiento. Esa falta de concentración se manifiesta claramente en nuestra dificultad para estar a solas con nosotros  mismos. Quedarse sentados, sin hablar, fumar, leer, beber, es imposible para la mayoría de la gente. Se ponen nerviosos o inquietos y deben hacer algo con la boca o con las manos. (Fumar cigarros es uno de los síntomas de la falta de concentración: ocupar la mano, la boca, los ojos y la nariz.) (Freud murió de cáncer por cigarros, el padre de la psicología).

En la sociedad actual solo se posee disciplina y concentración para levantarnos temprano e ir a trabajar 8 horas diarias o actividades afines (educación, trabajo, ganar dinero).

Quien haya tratado algunas ves de dominar un arte sabe que la paciencia es necesaria para lograr cualquier cosa. Si aspiramos a obtener resultados rápidos, nunca aprenderemos un arte (El niño aprende a caminar con mucha disciplina y concentración, se cae hasta que lo logra). Para el hombre moderno, sin embargo, es tan difícil practicar la paciencia como la disciplina y la concentración. Todo nuestro sistema industrial alienta precisamente a lo contrario: la rapidez. Todas nuestras maquinas están diseñadas para lograr rapidez: el coche y el aeroplano nos llevan  rápidamente a destino – y cuanto mas rápido mejor - La maquina que puede producir la misma cantidad en la mitad de tiempo es muy superior a la mas antigua y lenta. Naturalmente, hay para ello importantes razones económicas. Pero, al igual que en tantos otros aspectos, los valores humanos están determinados por los valores económicos. Lo que es bueno para las maquinas debe serlo para el hombre- así dice la lógica. El hombre moderno piensa que pierde algo - tiempo. Cuando no actúa con rapidez; sin embargo, no sabe que hacer con el tiempo que gana - salvo matarlo-.

-Eric Fromm (extracto del libro "El arte de amar").-


 

15 de julio de 2011

Enter the Void


"No es que nos escapemos de la realidad...la buscamos, porque esta no es la realidad. Esto es una pesadilla colectiva donde la vida es denigrada y extraviada"
                                                                                                       .-Symns

7 de julio de 2011

No ser



El hombre en el cual la sabiduria actua sin impedimento no daña a ningun otro ser con sus actos, y aun asi no se considera "bondadoso" o "manso". Tampoco se preocupa por sus propios intereses y no desprecia a aquellos que si lo hacen. No lucha por ganar dinero y no convierte en virtud la pobreza. Sigue su camino sin apoyarse en los demas y no se enorgullese de andar solo. Mientras que no sigue a la muchedumbre, no se queja de aquellos que lo hacen. El rango y la recompensa no lo atraen; la desgracia y la verguenza no lo desaniman. No esta buscando constantemente el bien y el mal, decidiendo continuamente "Si" o "no".

Los antiguos decian: "El hombre sabio permanece en el anonimato. La virtud perfecta no produce nada. No-ser es ser de verdad, y el mas grande entre los hombres es nadie.


Tomas Merton


1 de julio de 2011